Chispitas hace ocho meses cuando la rescatamos.
Así nos llegó Chispitas allá por el mes de Julio. Han pasado ocho meses y Chispitas ha cambiado, su vida ha cambiado y su semblante también, pero a pesar de ello sigue buscando un hogar. Un hogar que cada día lo ve mas lejano, un hogar que nunca nadie le ofreció. Chispitas sigue siendo un bodeguero, esa raza a la que nadie mira a pesar de lo hermosa que es.
Chispitas, en ochos meses a cambiado muchísimo.
Nadie se ha ofrecido a darle una oportunidad, nadie le hace un huequito en su corazón. Chispitas sigue siendo la completa invisible que nadie nunca verá y su desesperanza es la nuestra. Creíamos que seriamos capaces de encontrarle ese hogar y... le hemos fallado!!!
Nuestra preciosa Chispitas (foto actual)
Solo con mirar la carita que tiene y la que tenía cuando estaba en la calle, te entran ganas de gritar. ¿Por qué nadie la quiere? Nosotras y ella hemos hecho lo posible para ese cambio, pero sin vuestra ayuda y sin que su imagen llegue a todas partes no podremos hacer más. No queremos que Chispitas sea una más, ayudarnos a difundirla, ayudarnos a que sea especial para alguien, ese alguien que por una vez vea el amor que tanto traduce su mirada, el cariño que tiene guardado y que esta deseando volcar en esa persona que la quiera para siempre!!!
¿ Lo conseguirá?
Conocer el amor de los que amamos es el fuego que alimenta la vida.
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